3 de marzo de 2010

Cuba en bicicleta

Ahora tambien con el enlace al texto impreso.

Presentación íntegra del viaje a partir de las conversaciones con un periódico local, El Extremadura.

Bueno, voy a empezar dando unas pequeñas pinceladas de mí para que los lectores puedan tener una idea de cómo soy.

Lo primero, me llamo Eduardo y decirte que soy natural de Cáceres desde hace algo más de tres décadas pero actualmente resido en Madrid dónde me he dedicado a estudiar -terminé la Licenciatura en Humanidades el pasado Septiembre, después de haber terminado Empresariales anteriormente- al tiempo, he trabajado para Correos de manera eventual. Esta forma de contratación me brinda la posibilidad de proyectar viajes de entre 2 y 4 meses, los cuales siempre que puedo trato de aprovechar.

Desde hace unos años he descubierto una manera de viajar diferente a la generalmente establecida hoy día, ésta no es otra que desplazarme en bicicleta a lo largo y ancho del planeta. La curiosidad de conocer nuevos lugares y culturas se unió de manera casual a mi afición por la bicicleta de montaña y, así, conocí lo que yo denomino la ciclo-aventura. Esta manera alternativa ha supuesto para mí una pequeña-gran revolución en mi manera de entender el mundo y, en él, a sus gentes y culturas. La proximidad que este medio de transporte te ofrece respecto de la proximidad a las gentes y culturas por las que viajas hace que tengas un mayor conocimiento de la realidad social en la que te mueves y, así, puedas comprender la cultura autóctona desde sus contradicciones eliminando cualquier prejuicio concebido a priori, por otra parte, la filosofía de viaje que llevo a cabo está permanentemente en contacto con la naturaleza, puesto que, siempre que puedo aprovecho para disfrutar de los placeres que ofrece ésta a aquellos que están dispuestos a pernoctar o vivaquear sin más cobijo que la inmensidad del orbe celeste. Los placeres de los que hablaba no son otros que una cálida puesta de sol después de un día de entrega ciclística, un inmenso cielo estrellado bajo el cual descansar o un nuevo amanecer que anuncie la proximidad de nuevas aventuras.

Hasta este momento he realizado algún que otro viaje más o menos largo en bicicleta: El primero fue un camino de Santiago desde Madrid que supuso mi descubrimiento de esta forma de viajar. A partir de éste momento se me abrieron un sin fín de proyectos a los cuales, poco a poco, voy dando forma. Otro viaje del que guardo un gran recuerdo fue la travesía que hice desde Barcelona a Atenas, (vía Italia), dónde además, de viajar por diferentes culturas fuí realizando un viaje en la historia de los pueblos que vivieron en la ribera del Mar Mediterráneo, (como fueron: Imperio Romano, Cultura etrusca, Magna Grecia y la cultura minoica, entre otras), otro viaje que he realizado recientemente ha sido el de recorrer nuestro acogedor y vecino Marruecos con la idea de alcanzar el desierto desde Algeciras. Otros más modestos me llevaron a recorrer la Sierra de Gredos o el Sistema Ibérico, ya en nuestro país.


El objetivo de éste viaje podría definirlo como un acercamiento a la realidad política, social y cultural del pueblo cubano desde el mayor acercamiento personal posible, y, por ello, creo que, viajar en bicicleta me va a permitir obtener esa visión panorámica de la realidad cubana en una dimensión más completa y enriquecedora.


Respecto a la pregunta que me haces, ¿Qué espero encontrarme allí?, pues, sólo puedo decirte que, no sé exactamente que espero de Cuba pero de una cosa sí estoy, casi seguro, y es que la convivencia y mi aprendizaje de las relaciones sociales en cuba puede resultar toda una gran aventura, y es, eso mismo, lo que me propongo buscar.


Dando respuesta a otra de tus preguntas, decirte, que la preparación de éste tipo de viajes es mínima, aunque pueda parecer lo contrario y dejando a un lado la preparación del equipo básico ciclístico y de campaña, la mejor manera de afrontar este tipo de aventuras es la improvisación ya que, ésta, es la antesala de una libertad de movimientos y de acción mayor, más completa e infinitamente más genuina que otros rígidos planes de viaje.

Me alegro de que me hables de la financiación puesto que es la primera vez que dispongo de esponsores a los cuales estoy enormemente agradecido por el apoyo que he recibido de ellos (Bicicletas MSC, Bikezonatv, Mammoth, Calmera y Karakol), todos han colaborado en mi proyecto con la entrega de material ciclístico, desde una bicicleta hasta útiles, consumibles, recambios o ropa, por ejemplo. En este apartado entra un factor importante dentro de los objetivos del viaje, -que antes no he mencionado-, y no es otro que, al finalizar la aventura donaré todo éste material, incluido la bicicleta, a alguna asociación de deportes local. El resto de los gastos del viaje son fruto del ahorro de todo un año.

Y aqui os dejo el enlace de la publicacion impresa por JAIME J. TORBELLINO el 22/02/2010:

http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/noticia.asp?pkid=494234



Saludos!

Eduardo.

4 comentarios:

Santi Val dijo...

Que grande eres Edu!!! Felicidades por el proyecto, te deseo toda la suerte en el! Como bien comentas que mejor manera de conocer otras culturas que desde la proximidad de la bici!!! A disfrutarlo!!! Salut!

Keducc dijo...

Que bien, me ha gustado tu artículo. Yo también soy de Cáceres (de un pueblo a 49 km) y me gusta aparte de la montaña, mucho la bici.

Seguiré tu aventura por Cuba, mucha suerte.

Clara dijo...

Ostras Edu, tu si que sabes defenderte en este sector, con ese don de palabra y esa energia que demuestras en todo lo que haces,umm puedo ir??

Carlos Hervás dijo...

Me alegra saber de ti Eduardo,recuerda que tenemos escaladas pendientes cuando vuelvas y quizas alguna salida en bici.
Un abrazo.